martes, 23 de junio de 2009

Hoy la fase dos de las composiciones rarunas de lo que parecen
ser traumas infantiles reprimidos.

Parece ser que tras un par de cortes sibilantes que proceden de una dominatrix con la braga-faja demasiado ceñida, Jonsy no volverá a la biblioteca. Al menos hasta que la bibliotecaria no cumpla lo que sugiere, sino vendrá con su radiocasette de gran potencia y nos enseñará una estridente canción de Death Metal, la más potente y chillona que puedan tocar tres pastores de su pueblo.
Él es de Badajoz, aunque el cuarto integrante es de Bilbao.
No, en serio, la ilustración no tiene nada que ver con eso. Un saludo.

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